Empresas Familiares
¿Dónde hay confianza, … da gusto? Resolución de conflictos en empresas familiares.
Familia y trabajo pueden ser fuente de conflicto cuando no se combinan de forma adecuada. Porque ya lo dice el refrán, que donde hay confianza…
¿Y cómo es posible? Si en general, cuando hablamos de los valores clave en los equipos excelentes de trabajo, la Confianza es uno de ellos, ¿qué nos hace acabar el refrán con asco en lugar de con gusto?
En España se estima que el 99% de las empresas son PYMES y que aproximadamente el 85% entran en la categoría de empresas familiares. Y claro, más allá de la nueva ola “startup” que vivimos actualmente, donde parece que si no emprendes no eres nadie; en España la cultura de creación de negocios es antigua. Y la mayoría de las familias cuentan con ese loco emprendedor, con esa soñadora empedernida, que se lanza sin paracaídas al desafío de montar su propia empresa.
Y cuando el negocio empieza a funcionar, las primeras personas con las que cuenta, son precisamente esas, “las de confianza”, es decir, las más cercanas, o sea, la familia. Y las empresas comienzan a crecer con la incorporación de hermanos, hijas, sobrinos, … Porque existe la creencia de que, por haber compartido un hogar, por haberse criado juntos, las personas comparten los mismos valores, tienen la misma visión de las cosas.
Y sin embargo no suele ser así. Y esa misma “confianza” de las primeras fases de crecimiento, que fue una ventaja para sacar la empresa adelante en los inicios; se convierte después en un boomerang que golpea duro cuando aparecen los conflictos internos en la familia.
¿De dónde surgen estos conflictos si la empresa crece y va bien?
Por distintos motivos, aparentemente de carácter empresarial, como discrepancias en los planes de expansión, o diferencias en el plan sucesorio, o cuestiones relativas a la capacitación de los familiares que trabajan en la entidad.
Y todos estos motivos son reales. Tanto como los que tienen que ver con los problemas de comunicación. Porque se dan por acordados ciertos temas que nunca se hablaron, o se asumen criterios sin contrastar opiniones.
Pero una de las cuestiones clave en los conflictos en las empresas familiares subyace a todos estos temas, que por cierto, también sufren el resto de empresas, sin ser familiares. Se trata de las relaciones previas, los vínculos familiares, que se instalan en la empresa al ir incorporándose los distintos miembros de la familia.
Hablamos de la manera en que las personas se relacionan entre sí, fruto de sus interacciones desde que se conocen, es decir, desde que nacieron, ya que son familia.Y es fácil identificar cómo nos tratamos o qué opinión tenemos de nuestra hermana, o del tío, o de nuestro propio padre. O cómo nos ha tratado a nosotros nuestra querida madre desde que éramos pequeños. Pero lo que resulta mucho más complejo, es ser capaz de no trasladar ese mismo patrón de comportamiento a la empresa, al despacho, a las reuniones de trabajo.
Y por eso, cuando de manera inconsciente a veces, nos relacionamos de esa manera, surgen los conflictos:
- Entre hermanos y hermanas: posición en la empresa, sueldo, capacidad de decisión.
- Entre fundador y herederos: propiedad, gestión, reparto igualitario, méritos, habilidades, experiencia.
Por eso, al tiempo que se toman las decisiones para llevar acabo soluciones prácticas, hay que implementar un proceso de transformación del equipo, que permita un cambio en la relación entre sus miembros. En Psinergia Coaching proponemos una metodología propia, personalizada para cada entidad, fundamentada en el desarrollo de 4 pilares clave que permiten realizar este cambio en la dirección de la empresa familiar.
Una vez que el sistema familiar y el sistema empresarial han sido identificados, analizados, y separados, se construye un nuevo modelo empresarial familiar fundamentado en un sistema de comunicación efectiva y una gestión emocional adecuada.
A partir de ese nuevo modelo se pueden implementar con facilidad, asegurando que serán sostenibles y saludables en el tiempo, cambios de orden práctico como:
- Definir Organigrama: quién es quién, quién hace qué, quién decide qué.
- Plan de Formación: qué habilidades son necesarias y no están disponibles entre los miembros de la familia.
- Incorporar personal no familiar en puestos directivos.
- Planificar el relevo generacional.
Si desea saber más sobre la resolución de conflictos en la empresa familiar, puede asistir a la conferencia del próximo jueves 18 en Cártama.
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